La figura intelectual de Gonzalo Puente Ojea seguramente tendría un lugar central en una hipotética actualización de la historia de los intelectuales heterodoxos españoles. Si bien su obra a nivel académico no ha tenido la repercusión merecida, sí ha tenido, en cambio, una notable difusión pública, con numerosas reediciones de sus libros y la activa intervención del pensador en medios relevantes de prensa, radio, televisión y conferencias. Esto se debe a que pertenece a la tradición de filósofos que ejercieron de embajadores, como Hume, Leibniz, o el propio Maquiavelo, lo que da a su discurso de una consistente enjundia al teorizar después de haber conocido los entresijos de la política.